“Será un fenómeno astronómico que se podrá ver a simple vista, siempre y cuando no esté nublado el cielo y el observador tenga un buen horizonte, despejado. Es decir que no se necesitará de un telescopio para poder ver la triangulación de astros que se formará”, dijo en diálogo con EL DIARIO el coordinador del Observatorio Astronómico de Oro Verde, Mariano Peter.
De acuerdo a la información proporcionada por distintos observatorios, a las 0.18, la Luna entrará en fase de cuarto creciente y se encontrará a unos 380.000 kilómetros de distancia de la Tierra, el sexto planeta del sistema solar a 1.370 millones de kilómetros y Espiga, la estrella más brillante de la constelación zodiacal de Virgo, a 260 años luz del sistema solar.
La triangulación astral es parte de un fenómeno óptico que ocurre debido a la perspectiva visual terrestre y comenzará a notarse minutos después de las 19.
Como recomendación se sugiere que para distinguir el fenómeno sin dificultades será conveniente primero localizar la Luna para luego detectar el planeta Saturno que se verá similar a una estrella de color acaramelada, en tanto que Espiga se verá de color azulado.
Horizonte despejado. “Si el cielo está despejado, sin nubes, se podrá distinguir, a simple vista, este fenómeno. Recomiendo que se busque un horizonte despejado, sin árboles, para poder ver los astros”, indicó Peter.
Si bien las primeras informaciones respecto a este fenómeno surgieron desde el observatorio de la provincia de San Luis, lo cierto es que en toda la Argentina se podrá apreciar la triangulación que formarán la Luna, Saturno y la estrella Alfa de Virgo.
Como Espiga está cerca de la eclíptica –camino imaginario en el cielo por donde transitan el Sol, la Luna y los planetas– la estrella puede ser ocultada por la Luna y a veces por planetas. La próxima ocultación por un planeta tendrá lugar el 2 de septiembre de 2197, cuando visto desde la Tierra, Venus pase por delante de Espiga produciendo un mini-eclipse.
Pero este no será el único fenómeno que se verá en el cielo este año. A la súper Luna que se pudo apreciar el 23 de junio pasado, se le sumará hoy el triángulo de astros y en noviembre, según adelantó el coordinador del Observatorio de Oro Verde, si se cumplen con las predicciones entre octubre y diciembre habrá nuevos fenómenos.
Uno de ellos, que será un fenómeno espectacular será la lluvia de meteoros y para noviembre, también a simple vista, podrá verse el cometa Ison. Para ese mes, el cometa se acercará a unos 1,2 millones de kilómetros del Sol y brillará más intensamente que la Luna llena y esparcirá una gran cantidad de partículas sobre la Tierra.
El Ison (C/2012 S1) fue visto por primera vez en septiembre de 2012 por el astrónomo ruso Artiom Novichónok y su colega bielorruso Vitali Nevski por medio de la Red Internacional de Ciencia Óptica (ISON, por sus siglas en inglés), situada cerca de Kislovodsk, en el sur de Rusia, según se destaca en una página especializada en astronomía.
Lo singular de esto será que el cometa, posiblemente el más brillante de la década, brillará tanto que se podrá ver perfectamente desde la Tierra sin dispositivos especiales. Según las estimaciones preliminares de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio de Estados Unidos (NASA), basadas en la imagen del telescopio Hubble, el núcleo del Ison tiene un diámetro de entre 4,8 y 6,4 kilómetros solamente. Su paso permitirá a los científicos obtener nuevos datos sobre la naturaleza de los cometas.
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